MARCO ANTIGUO
En muchos mercadillos, tiendas de segunda mano, casas antiguas y sobre todo en la basura, podemos encontrar marcos muy elaborados y de madera de calidad que se han roto, desencolado o simplemente "decolorado". Y se merecen una segunda oportunidad, ya sea restaurando y conservando su aspecto original o adaptándolo a nuestra decoración.
En mi caso, a mi suegro le ofrecieron unos vecinos un conjunto de marcos viejos que iban a tirar al hacer una reforma. Algunos eran muy sencillos, otros tenían un acabado en pan de oro y otro estaba tallado en escayola.
1º: Encontrar la pieza: A mí me enamoró este último, el marco era precioso tal y como estaba, con un acabado deteriorado, en tonos beige y unas formas en escayola ideales. El problema es que la escayola, sobre todo en las esquinas y bordes estaba descascarillado, pero era la pieza perfecta para la idea que tenía.
No se aprecia muy bien pero lo blanco son las partes deterioradas en las que la escayola se ha descascarillado y el color se ha ido. Como no sé trabajar la escayola y el "roto" no era muy profundo, lo que hice fue lijar esas partes con una lija muy fina hasta conseguir disimular el escalón. Si el escalón o agujero fuera muy profundo se puede rellenar con masilla especial o escayola.
2º: Lijamos muy suavemente toda la pieza ya que al ser escayola solo queremos retirar la pintura, no estropear el moldeado.
3º: Una vez lijado, lo pintamos del color base que queramos. Yo elegí el blanco, nunca uso blancos puros para trabajos "antiguos", me gustan los blancos grisáceos o tiza, ya que el blanco "neutrex" es más para estilos modernos.Aplicamos un par de capas para que cubra bien.

Al ser un marco con relieves y formas, es el elemento perfecto para darle un aspecto desgastado y envejecido. Se puede pintar encima de otro color y luego lijar con papel de lija o lana de acero, haciendo más fuerza en los relieves, donde de forma natural se desgastan, pero en este caso utilicé la técnica de la pátina de la que ya os hablé. En otro trabajo os explicaré esa técnica.
4º: Aplicamos pátina: esta vez de una manera más "basta". Necesitamos:
- 1 parte de aguarrás, 3 de aceite de linaza y 2 partes de la pintura elegida. En la entrada de las sillas usamos óleo y en una cantidad muy pequeña, en este trabajo queremos que el color de la pátina destaque en casi toda la estructura.
Mezclamos bien y mojamos el pincel, poniendo interés en coger bien de pintura. Yo hice mi propio color azul, mezclando azul, blanco y gris.
Aplicamos en pinceladas, como si estuviéramos pintando "normal", En mi caso primero en los bordes exteriores e interiores, dejando la parte central (donde están los adornos) en blanco. Si al pasar el pincel no nos gusta el resultado se va retirando con un trapo, Lo que hace el aceite de linaza y el aguarrás es que la pintura no cubra "opacamente" dando ese aspecto desgastado y envejecido que buscamos.
Para la parte del dibujo mojamos menos el pincel de pintura (simplemente con mojar bien y retirar la pintura con el borde del cacharro) y lo aplicamos principalmente en los dibujos, pasando un trapito para eliminar los excesos y, en la parte lisa, pequeñas pasadas para darle un aspecto más luminoso y que así la foto resalte más.
5º: Dejamos secar y ya podemos ponerle una foto. Yo estoy esperando a las de la boda, así que de momento no puedo enseñaros el resultado final.

Espero que os guste y que lo pongáis en práctica. Si queréis podéis escribirme y plantearme vuestras dudas, sugerencias y opiniones.
Besos,